Lassie (marca registrada)

Lassie (marca registrada)

La cuarta serie de televisión más longeva de la historia es Lassie. Las 17 temporadas de las aventuras de un perro y sus numerosos dueños, fueron un éxito mundial.

Desde nuestra perspectiva, la de comienzos del siglo XXI, nos puede parecer una serie algo tontorrona y almibarada, pero el dueño de Pal, el actor canino, se hizo de oro gracias a su confianza en el valor de los derechos intelectuales.

La historia de Lassie comenzó en el cine, y cuando el estudio decidió que la séptima sería la última película, le debían cuarenta mil dólares al actor canino. Su entrenador decidió que mejor que luchar por esa cantidad (que a día de hoy equivaldría a 370.000 dólares) aceptaría los derechos del nombre y la marca registrada “Lassie”. Salió ganando.

Acuérdate de que en cualquier contrato de publicación debería figurar una cláusula que determine cuándo y en qué circunstancias volverán los derechos al autor. Si alguien, en algún momento, de alguna forma, se va a forrar con la historia que tienes tú en tu disco duro… deberías percibir tu parte.

La inspiración está en todas partes


La inspiración está en todas partes

Voy a proponer un comienzo para una novela de aventuras fantasiosas.

Un hombre derriba un tabique en su casa y descubre que detrás de la pared hay una habitación misteriosa. Cavando en ese espacio encuentra un túnel que conduce a una enorme ciudad subterránea que fue construida por una civilización que desapareció hace miles de años.

¿Crees que tengo una gran imaginación? ¿Soy creativo y fantasioso?

Pues no. Esta historia no es producto de mi imaginación. Ocurrió de verdad en 1963. Sencillamente sigo el consejo omnipresente de ‘leer mucho’ y me gusta descubrir hechos insólitos.

Tú puedes hacer lo mismo.

Un artículo sobre el incidente con muchas fotos se encuentra AQUÍ.

El arco iris de la lectura

El arco iris de la lectura

Entre 1983 y 2006 los niños de Estados Unidos podían disfrutar de un programa de televisión que animaba a la lectura. “Reading Rainbow” realizaba unas buenas y atractivas dramatizaciones de los primeros capítulos de novelas juveniles; cuando tenía al público entregado, les decía que para saber el resto de la aventura, sólo tenían que leer el libro.

Hace un par de meses el ex-presentador de la serie hizo un intento de financiar la vuelta de ese programa, tan querido por toda una generación de norteamericanos. Ahora esos fans son adultos y gracias a “Reading Rainbow” aman la lectura; puede que incluso consideren que parte de su éxito en la vida se deba a ese hecho. ¿Estarían dispuestos a donar dinero para que una nueva generación recibiera esa misma ayuda?

Se propusieron un ambicioso proyecto en Kickstarter, una página web de micro mecenazgo. La meta era conseguir nada menos que un millón de dólares en 30 días. Si no llegaban al millón, se cancelaría todo.

En 12 horas pasaron del millón.

Viendo la fantástica respuesta, se pusieron una nueva meta: CINCO millones. Poco a poco iba subiendo la cifra . Actores de Star Trek, Veronica Mars, y otras series de éxito se ofrecieron para hacer lecturas públicas de libros en colegios y bibliotecas a cambio de contribuciones. Cuando se acercaban ya a los cuatro millones donados, Seth McFarlane (creador de la serie animada Padre de Familia) se ofreció para igualar todas las dona­ciones dadas hasta un máximo de un millón.

La campaña se cerró con $5.408.906 que, junto con la contribución de Seth McFarlane, llegó a casi seis millones y medio. Con ese dinero podrán dar acceso gratuito a la nueva serie a miles de colegios de barrios marginales.

El hecho de que un record de 105.000 personas contribuyeran demuestra que sigue habiendo personas que aprecian la lectura, que aman los libros, que estarán encantadas de leer tu novela. Pero pongamos un poco de contexto. La vuelta de Reading Rainbow es una historia de esperanza para la lectura y los libros, pero en un país tan grande como Estados Unidos por cada persona que sí contribuyó, hay más que tres mil que no lo hicieron.

Puede que en tu familia y entorno haya docenas de personas que ignoran tus esfuerzos por publicar. Da igual. Estás escribiendo para esa pequeña minoría especial que, sumados, forman los centenares de miles de personas que devoran un buen libro.

Corta el rollo

Corta el rollo

Empezó como una broma, pero se hizo tan popular este concepto que se ha incorporado como una opción de Youtube. Si añades “&wadsworth=1” a la dirección de cualquier vídeo, el visionado comenzará saltándose el primer 30% del contenido.

Un usuario de internet, de nombre Wadsworth, descubrió que casi todos los vídeos subidos por usuarios donde enseñan alguna habilidad (cómo tocar la guitarra, cómo separar una yema de la clara o cómo escribir una novela) pasan casi un tercio del tiempo con una presentación personal y una casi siempre aburrida explicación de por qué ha realizado el video.

¡Que se callen! Yo sólo quiero ver cómo se separa una yema de una clara. En muchos casos la opción Wadsworth es la solución.

¿Es la solución para tu novela? Si te está costando que tus lectores de prueba se enganchen con la historia, prueba a darles una copia donde has borrado el primer 30% de las páginas. ¿Se confundirán? Es posible; te has cargado todos esos capítulos donde preparas el camino hacia tu historia. Pero la línea que separa “estar confundido” de “estar intrigado” es una línea muy fina.

Para los curiosos, AQUÍ hay un link a un video de cómo separar una yema…usando el constante Wadsworth.

Gramática dramática


Gramática dramática

Los libros de texto de “lengua y literatura” nos enseñaron mucho. Dominar el idioma es esencial para poder contar una historia, pero no lo es todo.

Por ejemplo, centrémonos en este ejercicio que encontré hoy en uno de estos manuales:

"Pasa las siguientes frases de tercera a primera persona:

1. Él es muy guapo.
Yo soy muy guapo.

2. Ella estaba limpiando su coche.
Yo estoy limpiando mi coche”.

Un novelista tendría otra manera de enfocar la misma tarea:

1. Él es un maltratador pero nunca lo reconocerá.
Yo sólo lo hice por que me provocaste, y más te vale no decir nada a nadie.

2. Ella se metió en un edificio en llamas para salvar a un desconocido.
Hice lo que cualquiera hubiera hecho en la misma circunstancia.

3. Ella es elegante, ha envejecido con dignidad.
Yo fui muy guapa pero, poco a poco, todo va desapareciendo.

La gramática es importante, esencial incluso, pero hay mucho más. Si has entendido el ejercicio, pon tu propio ejemplo en los comentarios.

South Park


South Park

Trey Parker y Matt Stone, los creadores y guionistas del irreverente South Park, desvelaron a un grupo de estudiantes su truco para hacer guiones con sentido.

Tienen una pizarra donde apuntan un resumen de cada escena. Entre escena y escena colocan una frase conectora… una de tres posibilidades 1) “y por eso luego pasa lo siguiente” 2) “…y sin embargo…” 3) “…y después…”

Si dos escenas están conectadas con la opción tres, saben que algo va mal y necesitan trabajar más en el guión. Cada escena tiene que ser conse­cuencia de lo anterior (opción uno) o tiene que aportar algo nuevo a la historia (opción dos). Una historia compuesta por una secuencia de escenas que van pasando una detrás de otra, (“y después” pasa lo siguiente), no tiene ni dirección ni razón de ser. Es, simplemente, un mal guión.