Siempre te queda la palabra


Siempre te queda la palabra

Cuando Mahler oyó tocar al pequeño Erich Goldberg bailó por la habitación exclamando que ese niño, que por aquel entonces tenía sólo 10 años, iba a ser el siguiente Mozart.

Goldberg, judío austriaco, llegó hasta Hollywood donde cosechó grandes éxitos componiendo extraordinarias bandas sonoras.

Cuando los Nazis anexionaron su país, un amigo compositor le visitó y le pilló in fraganti haciendo las maletas. Se volvía a Austria; una decisión a la vez romántica, valiente y suicida. En ese momento Goldberg estaba trabajando en la banda sonora de Robin Hood y su amigo le persuadió para que continuara trabajando y se olvidara de ese peligroso viaje porque combatir el nazismo físicamente era una total locura pero que con su arte podía expresar su opinión y seguir con vida: “El Sherrif de Nottingham, malvado y corrupto, luchaba contra los hombres libres; es la misma historia de siempre. ¡Exprésalo en la música!”

Por esa partitura, recibió el primer Oscar otorgado a un compositor, y en el manuscrito en papel de la música de esta escena, se puede leer una vez tras otra de su puño y letra, entra pentagrama y pentagrama, la frase: “Mata a los Nazis”… Y una vez que te lo cuentan no puedes evitar escuchar ese sentimiento que impregna la estridencia de la orquestación.



Expresa tus emociones a través de tu arte. Escribe sobre tus personajes con la pasión, alegría o desesperación que te produce tu vida y lo que la rodea.

2 comentarios :

  1. Excelente, como siempre, me encanta la forma en la que levantan el ánimo de sus lectores.. <3 <3

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  2. y murioooooo, excelente pieza y muy buen consejo. :D

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